Todos tenemos conflictos, algunos insignificantes, otros un poco más grandes y algunos más que llegan a ser enormes. Si bien, estos son parte de la vida diaria y evitarlos, no depende completamente de nosotros, es importante aprender a lidiar con ellos y resolverlos de la forma más empática y pacífica posible.
Si estás interesado en solucionar los conflictos que tienes con personas cercanas a ti, lo primero que hay que hacer es:
Guardar la calma
El libro más antiguo del mundo cita que: La blanda respuesta quita la ira; mas la palabra áspera hace subir el furor. Esto quiere decir que el fuego no se apaga con fuego, si la otra persona está sumamente exaltada, gritando y reclamando cosas que pasaron hace medio siglo, no reacciones de la peor manera y sobretodo no caigas en provocaciones.
Sabemos que no eres de palo, pero nada ganarás con ponerte a su nivel.
Sé empático
Si bien, hay muchas formas de reaccionar trata de ponerte en su lugar, entender su situación y sus sentimientos, quizás tu reaccionarias de la misma forma o peor.
Renuncia a ser juez
Todos hacemos juicios de valor sobre nuestras acciones y las de los demás, quizás el problema se originó cuando le diste un consejo que llevaba consigo una gran dosis de juicio, un insulto y hasta un gesto de desaprobación.
Debes entender que no venimos a juzgar las acciones de los demás, si algo no te parece correcto, no lo expreses, ya que eso siempre originará un conflicto.
Aprende a escuchar
Entre ambos busquen la raíz del conflicto, no importa qué tan atrás está en el tiempo. ¿Tu hermana te guarda resentimiento porque cuando eran niñas le robaste su muñeca favorita? Por más ridículo que te pueda parecer eso la lastimó y sigue en su mente, incluso después de los años.
Trata de entender su frustración y ofrece una sentida disculpa, remedia la falta encontrando una muñeca igual o dándole un regalo, que ella note que tomas en cuenta sus sentimientos y te esfuerzas por remediar el mal causado.
Da amor
¿Alguien te dijo cosas que te lastimaron? Trata de sobreponerte y no devolver ese mal, todos somos crueles desde la esquina del dolor y el coraje.
Demuestra tu inteligencia emocional siendo comprensivo, con un abrazo (si no existe riesgo físico de por medio) o simplemente espera a que las cosas se calmen para buscar solucionarlas.
Perdona
El perdón es la llave para la libertad emocional, si bien, hay muchas formas de herir a alguien, encuentra la forma de superar cualquier falta que te hayan hecho o que tu hayas hecho. Recuerda que todos nos equivocamos y así como tu necesitas ser perdonada, otros también.
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