Una de las principales razones para aplicar a una vacante es el salario que se ofrece, sin embargo, no es la única, pues también se busca que la empresa respete el horario laboral, haya buena comunicación entre compañeros, entre otras.
Todos conocemos a alguien que se queja de su trabajo porque es “muy tóxico”, ya sea que el ambiente laboral es muy malo, hay explotación laboral, entre otras situaciones desagradables, pero siguen ahí porque la paga es buena.
Recordemos que aunque se tenga una buena compensación monetaria, la salud mental es mucho más importante. Habrá otras alternativas donde puede que te paguen lo mismo o más y será un ambiente totalmente saludable.
Para que una empresa sea un lugar deseado para trabajar debe de hacer sentir a sus empleados reconocidos y sobre todo valiosos.
Aunque los bonos por productividad, puntualidad, y otros tipos de incentivos monetarios siempre son bien recibidos, no todas las empresas pueden darle eso a sus empleados por cuestiones de presupuestos ajustados, pero no significa que solo con dinero extra se motive a los trabajadores.
Estos son 10 incentivos no monetarios que quieren los empleados
- Flexibilidad laboral
- Seguro de gastos médicos mayores
- Capacitaciones constantes
- Mejora de equipo (computadora, audífonos, software, etc.)
- Vales de despensa
- Buen ambiente de trabajo
- Celebración de cumpleaños
- Vacaciones
- Trabajo con propósito
- Buen liderazgo
Para integrar el salario emocional, el primer paso que deben dar las organizaciones o el departamento de RH es escuchar y observar a sus trabajadores para conocerlos mejor.
El segundo paso es identificar qué incentivos son mejores para cada uno, pues no es lo mismo motivar a un becario que sigue con sus estudios universitarios que a un Senior con hijos y familia.
El tercer paso es implementar el salario emocional, consciente de que la oferta de valor puede ser diferente para cada trabajador.
Lo que queremos es que el personal no se desmotive y deje la empresa, se busca que hable bien tanto de sus labores como del lugar de trabajo, para que los demás sepan que en esta empresa se respeta al empleado y se le valora por su esfuerzo.
Un buen líder sabrá como ejercer esos incentivos para mantenerlos en un excelente ambiente laboral donde el trabajo fluye e impacta en buenos resultados.
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